Las míticas J’Hayber

Que levante la mano todo aquel humano de más de 30 años que no haya tenido unas J’Hayber. De mi quinta no conozco a ninguno que no las tuviera. Yo debí ser un caso un poco raro, porque era de los que tuvo varias y no obligado, sino voluntariamente y que las compartía con zapas de otras marcas de relumbrón por decirlo así: Nike, Reebok, Converse, New Balance, etc., dentro por supuesto de los límites que marcaba tu madre o ya un poco más mayor dentro de los límites de los trabajillos que me iban saliendo.

El caso es que tuve dos New Olimpo que yo recuerde. No fue porque se me rompieran unas y luego me comprase otras, porque como bien sabéis todos, las J’Hayber no se rompían, daba igual lo que hicieras. Tuve dos, porque quise unas en color blanco/azul y por supuesto otras en riguroso negro (que se llamaban Aventura Olimpo en ese color), combinable perfectamente con mis camisetas de Iron Maiden, Helloween o Megadeth. También recuerdo haber tenido unas New Atenas, que eran las de bota y aquellas ya masmolaban que no se podía aguantar. Y las J’Hayber compartían mi armario con Cons, alguna Jordan y Reebok. Y no se sentían inferiores, porque las J’Hayber eran un zapatillón y además, mientras que otras me duraban poco más de un año, las Hayber duraban todo lo que quisieras. 

Las recuerdo inmensamente cómodas, con un cuero de primera calidad y como ya he dicho antes, absolutamente indestructibles. El caso es que después de tanto tiempo, la idea para esta entrada me surgió el otro día dando un paseo por la calle Bravo Murillo de Madrid. En una de cada dos zapaterías de dicha calle e incluso en dos tiendas de deporte de la misma tienen varias J’Hayber a la venta. Allí están, luciendo look atemporal y cueraco del bueno. Fue curioso porque en una de las tiendas de deportes que entré, los dependientes me miraban raro porque me tiré un buen rato con unas New Olimpo en la mano recordando sensaciones del pasado y escudriñando una zapa tan mítica. Me faltó probármelas para salir contento del todo de allí. El caso es que la New Olimpo al menos sigue rezumando una calidad importante, con buen cuero y con una calidad de acabados que salta a la vista. Se ve que es una zapatilla hecha para ser cómoda y para durar. El precio: 44 euros, dudo que haya muchas zapas actualmente con una mejor relación calidad/precio.

Creo que me acabaré comprando unas. Mucha gente no se las comprará nunca de nuevo por prejuicios o porque eran las zapas que su madre les obligaba a tener por no comprar unas más caras Nike, Reebok, Adidas o Converse. Como ya he dicho, no era mi caso; tuve varios pares porque me gustaban de verdad y, aún hoy me siguen gustando.

Por Supercarmann